Aunque Halloween tiene origen estadounidense, en Ciudad Juárez se celebra con gran entusiasmo gracias a su proximidad con la frontera. Esta festividad, marcada por los disfraces, decoraciones y la recolección de dulces, ha ganado terreno en México y en la frontera se vive con un estilo propio que mezcla elementos de Halloween y del Día de Muertos.

Durante la noche, familias juarenses salieron a las calles para disfrutar de la convivencia, mientras los niños disfrazados llenaban sus bolsas de dulces y sonrisas. Más allá del susto y la diversión, Halloween se ha convertido en una tradición de unión familiar en la frontera norte.