La cifra de fallecidos por la explosión de una pipa de gas en Iztapalapa subió a 21 personas. La última víctima fue una mujer de 50 años que estaba hospitalizada con heridas graves desde hace 8 días.

Actualmente 27 personas siguen internadas y 36 ya han sido dadas de alta. Las autoridades capitalinas han prometido apoyo a las víctimas y a sus familias y un comité se encargará de recibir donativos para ayudar a los afectados.