La pirotecnia, aunque forma parte de muchas celebraciones tradicionales, implica riesgos que van más allá de las personas. Veterinarios advierten que los perros y gatos son especialmente vulnerables al estruendo de los cohetes, ya que su capacidad auditiva es mucho más sensible que la humana.
Esto puede desencadenar reacciones de miedo extremo, desorientación e incluso ataques de ansiedad que, en algunos casos, ponen en peligro su integridad. Hay reportes de mascotas que, al intentar escapar del ruido, han resultado heridas o se han extraviado.
¿Cómo afecta la pirotecnia a perros y gatos?
Además del estrés psicológico, las explosiones fuertes pueden ocasionar daños físicos, como pérdida parcial o total de la audición. Ante este panorama, los especialistas hacen un llamado a los dueños para tomar medidas preventivas durante las festividades. Entre las recomendaciones más destacadas se encuentran mantener a las mascotas dentro de casa, cerrar puertas y ventanas para amortiguar el ruido, poner música relajante para distraerlos y, sobre todo, no dejarlos solos durante los festejos.
La conciencia ciudadana y la empatía con los animales resultan fundamentales para reducir los efectos negativos de la pirotecnia y garantizar que las celebraciones no se conviertan en una experiencia traumática para ellos.